Mario Ramos Cano es el marido de una prima hermana del delegado de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía en Huelva, Juan Manuel López. Es uno de los cinco allegados al alto cargo de la Administración autonómica o afines al PSOE de Bollullos Par del Condado –localidad natal del delegado– que fueron colocados en dependencias adscritas a la delegación, tras ser nombrado López, en mayo de 2008, como máximo responsable de Medio Ambiente en la provincia onubense, según informa José Carlos Aguado en El Mundo.
Ramos fue contratado por la Secretaría General de Aguas en Huelva en noviembre de 2008 como oficial de segunda a través de una oferta del Servicio Andaluz de Empleo (SAE). Llevaba seis meses en paro. De los 31 candidatos a cubrir siete plazas, él fue uno de los elegidos. Tiene un contrato laboral temporal y actualmente cobra 1.163 euros.
El esposo de la prima del delegado sostiene que no es un “enchufado”, como aseguran funcionarios de este departamento y el sindicato CSI-F, ya que dice contar con experiencia laboral y formación cualificada para trabajar como operador de presa. Según explica en declaraciones a EL MUNDO Andalucía, Juan Manuel López ni siquiera sabía que estaba trabajando en su Delegación hasta que fue a su casa a decírselo meses después.
“Fui un día a su casa a contárselo, le dije que era mi jefe, que trabajaba para él en la delegación y él me respondió ‘pues ahora me entero’. Parece increíble, ¿verdad?”, narra Mario Ramos, tras insistir en que cuenta con un currículo profesional “amplio y especializado” que “está desperdiciado”, pues hace ya tiempo que brega con un tractor “que nadie quería coger” y una desbrozadora.
Pese a que reitera una y otra vez que no fue “colocado a dedo” en Medio Ambiente por el primo de su mujer, defiende que “los políticos necesitan tener gente de su confianza para tener información”. Y así es. Ramos se convirtió -y aún sigue siendo- en “el hombre de confianza” del delegado, el que le chiva quién no trabaja, quién echa más cigarros de la cuenta y le descubre a sus “enemigos”.
“Donde estoy me entero de cosas que pasan en la Delegación que él, desde su despacho, nunca se hubiera enterado. Así que le ofrecí voluntariamente mi colaboración y a raíz de ahí tomamos café cada dos o tres días unidos en una lucha común por ponerle solución a muchos problemas que hay ahí dentro, y hacer que la administración funcione porque es de vergüenza”, apunta Ramos, quien llegó a redactar un informe con nombres y apellidos con sus averiguaciones.
Esta labor de ‘espionaje interno’ le ha supuesto que nadie le dirija la palabra en la Delegación y que ahora esté trabajando solo con un tractor y una desbrozadora en presas y canales de la provincia. No obstante, se siente orgulloso porque “es un acto de conciencia, ya que no podemos mantener la administración así, sobre todo ahora que no hay dinero para gastar mientras hay gente en la delegación que llevan años sin hacer ni el huevo”.
Para Ramos, el que funcionarios le señalen como uno de los allegados al delegado “enchufados” en Medio Ambiente es “por pura venganza”, por informar a Juan Manuel López “de la incompetencia total” que hay en su departamento.
Respecto a los otros cuatro vecinos de Bollullos vinculados al delegado o afines al PSOE que trabajan en la Secretaría General de Aguas en Huelva o en la Agencia de Medio Ambiente y Agua (Amaya), Ramos prefiere mantener las distancias.
“No sé cómo han entrado ni quiero preguntarlo. Lo normal ahí es pasar desapercibido”, apunta, tras afirmar que en Medio Ambiente “entran con facilidad hermanos, primos y familiares de otros que no son el delegado”.
“Investigar lo que haga falta”
Por su parte, el consejero de Medio Ambiente en la Junta de Andalucía, José Juan Díaz Trillo, se mostró ayer dispuesto en Huelva a “investigar lo que haga falta”, después de que el sindicato CSI-F reclamase la actuación de la Intervención de Hacienda y la Inspección del Servicio para aclarar “estas contrataciones irregulares”.
No obstante, Díaz Trillo pidió “prudencia” antes de levantar sospechas sobre el proceso de selección y entrada de empleados a empresas púbicas, al tiempo que subrayó que cuando se lanzan estas acusaciones “se debe hacer con todos los datos y por el camino adecuado, ya que no valen sólo opiniones o sospechas”.
Respecto a la denuncia del CSI-F de que estos “colocados” en la delegación onubense están trabajando actualmente en dependencias de la Junta sin contrato, el consejero descartó categóricamente esta posibilidad “porque es ilegal”.
Nada más concluir la rueda de prensa del consejero Díaz Trillo, el delegado de Medio Ambiente en Huelva, Juan Manuel López, se dirigió directamente al periodista de El Mundo Andalucía para recriminarle por “seguirle el juego” a los funcionarios. Cuando el redactor de este periódico trató de responderle, López se dio media vuelta y enfiló la puerta de salida dándole la espalda. Pese a que el periodista intentó hablar con el delegado, éste ya no tenía “nada más que hablar” y se refugió en un despacho.
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