jueves, diciembre 01, 2011

Nuevo premio internacional para el generoso S' Naranja

 

El vino, elaborado con Pedro Ximénez y Palomino, conquista el reconocimiento en el Concurso Internacional de Vinos
Está dejando de ser noticia, si bien los caldos alumbrados en el Condado y, más concretamente los de las Bodegas Sauci, siguen atesorando premios. El último, el cosechado en la edición 2011 del Concurso Internacional de Vinos y Espirituosos (Cinve), cuyo falló se ha hecho público recientemente y donde el vino S Naranja obtuvo el gran premio Fijev, así como una Gran Medalla de oro en la categoría de Generosos.

Estos premios, cuya entrega acogerá la capital española el 14 de enero, nacieron en 2006 y desde entonces su prestigio no ha dejado de ganar enteros gracias a la composición de un jurado de periodistas especializados, importadores, comercializadores, distribuidores, sumilleres y enólogos. No en vano, el concurso que celebran se encuentra avalado oficialmente por el UE y amparado por el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino.

De cara a esta edición 2011 y con objeto de internacionalizar el Cinve, la cita se trasladó hasta Miami para celebrar en tierras americanas este concurso, que ha tenido recientemente su réplica a finales de noviembre en Sevilla, donde la bodega del Condado se ha impuesto a caldos canadienses, franceses, mexicanos, peruanos, uruguayos; así como los gestados dentro de la geografía española en Castilla La Mancha, Navarra, Galicia, País Vasco o Aragón.

El S´Naranja es un vino generoso de licor elaborado con Pedro Ximénez y Palomino Fino. Su gestación perpetúa el modelo de producción heredado de 1860 en Moguer, consistente en utilizar las cortezas de naranja, previamente secadas al sol, para someterlas a un proceso de edulcoración mediante el uso de uvas dulces. Esta materia prima es macerada con el caldo hasta que éste queda impregnado con aromas de azahar. Posteriormente las cortezas son retiradas y el manjar líquido decantado y filtrado, listo para su proceso de envejecimiento en barricas de roble americano donde en bodega reposan un mínimo de diez años.

El resultado es un generoso de intenso color ámbar, brillante y limpio; mientras que en boca se revela suave, atesorando todo los matices de la naranja. Un compendio de virtudes que, a la vista de los resultados, conquista los paladares más exquisitos en los premios en los que se ha medido, así como en el mercado anglosajón, donde la bodega bollullera lleva años exportando con éxito de ventas.

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